Hay lugares que son más seguros que un banco, que un auto blindado, que un alcázar, porque hay lugares en donde él amor todo lo cubre, lo sana y lo soporta. Hay personas que son lugares y no son geográficos, sino espirituales. Recordé lo viajes a los que me invitó, la serenata en mi cumpleaños, los gestos de amor que día a día tiene conmigo, lo caballero que es, lo mágico que es estar con él, las cartas que me escribe, lo rico que me cocina, lo hermoso que me dice y me demuestra a diario. Lo mucho que oré por el hombre de mis sueños, por un amor real, sincero y a la antigua y por fin Dios me presento al amor de mi vida. Dos meses después de haber viajado a Colombia, viajamos a Oaxaca sin saber que iríamos rumbo al día más feliz por el momento de nuestra historia de amor pues me pidió matrimonio en Hierve el Agua, Oaxaca. Fue asombroso, auténtico, inexplicable, original, maravilloso, sensacional, espectacular, simplemente inefable. El mejor día de mi vida y un sueño hecho realidad! Mi respuesta siempre fue firme y segura un SI rotundo y sin finales. Un amor por el cual siempre apostare!